En interesante artículo del día de hoy, don "Espidi", un indígena yucateco, cuenta su experiencia como actor en esta nueva película de Mel Gibson en la que aparece como brujo maya. Al parecer, no tiene un papel tan relegado, pues en el film es un brujo que cuenta la historia de la caída del pueblo maya.
Lo interesante es que don Espidi recibió un pago de 160 mil pesos, con lo que puso un ciber café en el pueblito en el que vive (un lugar a unos 40 kms de Mérida).
Tal vez el comentario no hubiera sido gran cosa, pero ahora que estoy con la tesis y la cuestión de los impactos, me dije que esta es una excelente muestra de cómo el mundo está lleno de interrelaciones e impactos (positivos -porque alguien dirá de Gibson inyectó dinero a una zona pobre del país- o negativos -porque otros dirán que las que sufren son las tradiciones y que ello influencia al pueblito en ese sentido-)
Pareciera que a veces queremos ver a nuestro planeta como un conjunto de burbujas aisladas que no hay que tocar, mientras que los occidentales sí pueden hacer lo que gustan, pues ellos no pierden sus hábitos y costumbres (será porque ya no saben dónde quedaron ?)
Por cierto, el artículo original, como siempre, en el link del título
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